
El presidente colombiano cuestionó la salida de la exmandataria peruana y defendió nuevamente al expresidente Pedro Castillo, a quien considera víctima de una ruptura democrática.
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, reaccionó este viernes a la destitución de la exmandataria peruana Dina Boluarte, asegurando que “la traición se la pagaron con traición” por haber asumido el poder en reemplazo del izquierdista Pedro Castillo, de quien fue vicepresidenta.
La declaración del mandatario colombiano se dio horas después de que el Congreso de Perú destituyera de manera exprés a Boluarte por “incapacidad moral permanente”, tras aprobar cuatro mociones de vacancia con 122 votos a favor de los 130 posibles.
“Queda un presidente elegido popularmente preso y sin ser condenado. Es la ruptura de la Convención Americana de Derechos Humanos que se debe discutir de nuevo en todas las Américas”, expresó Petro, en alusión al encarcelamiento de Castillo.
Petro defiende nuevamente a Pedro Castillo
Petro ha defendido en reiteradas ocasiones al expresidente Pedro Castillo (2021-2022), quien fue destituido tras intentar disolver el Congreso y actualmente enfrenta un juicio por rebelión. La Fiscalía peruana solicita para él 34 años de prisión, acusado de haber intentado instaurar un gobierno de emergencia que gobernaría por decreto.
El mandatario colombiano sostuvo que el juicio a Castillo constituye “un insulto a la democracia y a la Convención Americana sobre Derechos Humanos”, y agregó que el único delito del exmandatario peruano “es ser pobre y de izquierda”.
Relaciones bilaterales con Perú
Las declaraciones de Petro sobre la crisis política peruana no son nuevas. En 2023, sus críticas a la destitución de Castillo llevaron al Gobierno de Perú a retirar a su embajador en Bogotá. Sin embargo, ambos países normalizaron sus relaciones diplomáticas en febrero de 2024, al acordar el restablecimiento de embajadores.
Con la salida de Dina Boluarte, el Congreso designó como presidente interino a José Jerí, titular del Legislativo, quien asumió la jefatura del Estado hasta las elecciones generales de abril de 2026.